Cómo dar un masaje erótico en 5 pasos

No seremos nosotros quienes rechacemos un buen aquí te pillo aquí te mato pero, a veces, para disfrutar del mejor sexo necesitamos ser pacientes y tomarnos las cosas con calma. Dedicarnos de lleno a los preliminares y a conectar con esa persona que comparte con nosotros las sábanas esa noche. Los besos, las caricias y un buen masaje erótico puede ser lo que necesitamos para hacernos ver las estrellas sin salir de la habitación.

No obstante, es probable que hayas podido comprobar por tus propios medios que no todos disponen del don de dar buenos masajes, y que lo que pretendía ser un masaje erótico resulta ser de todo menos excitante. Pero ¡no te preocupes! Con este artículo aprenderás a dar los mejores masajes eróticos que conseguirán que tu pareja libere tensiones y también se ponga a tono para una noche de pasión. Estos son los 5 pasos imprescindibles para dar un masaje erótico.

PASO 1: Prepara la habitación

Aunque parezca una tontería, la preparación y la aclimatación del ambiente son dos de los elementos más importantes para realizar un masaje erótico. Enciende velas aromáticas para crear un ambiente romántico y relajado, pon música que os sirva para ir entrando en calor (nada de death metal) y escoge aceites aromáticos y afrodisíacos para masajear a tu pareja. Un buen inicio siempre nos lleva a un gran final…

PASO 2: Comienza por la espalda y los brazos

El siguiente paso es comenzar con el masaje. Nuestro consejo es que vayas siempre de menos a más, al igual que con el resto de juegos previos. Puedes comenzar acariciando lentamente los brazos de tu pareja con la yema de tus dedos, desde la muñeca hacia los codos en dirección a su hombro. Después puedes utilizar ya toda la palma de la mano. Si notas que comienza a estremecerse ligeramente es que vas por buen camino.

A continuación, sigue por su cuello y la parte superior de su espalda. En este punto puedes masajear también un poco su cabeza, pasar tus dedos por su pelo, acariciar la parte superior de su cabeza y también su rostro. No te olvides de las orejas, pues es una de las zonas más sensibles y eróticas tanto de hombres como de mujeres.

PASO 3: Cambia de técnica

Para dar un masaje erótico es casi más importante el modo en cómo lo realicemos que la misma zona que estimulemos. Recuerda que se trata un masaje erótico. Esto significa que no eres un quiropráctico cuyo deber es extirpar todas las contracturas de tu pareja. Ha de relajarse y excitarse así que, como con todo, has de saber qué le gusta más y qué no. Prueba con diferentes técnicas, con roces, pellizcos, besos y presionando más o menos. Bien es sabido que del dolor al placer no hay un salto tan grande.

PASO 4: Desciende a sus nalgas

Una buena manera de dar un masaje erótico en la espalda es sentándote sobre las nalgas de tu pareja. Esta posición te permite inclinarte y besar su espalda mientras le abrazas con tus piernas. En este paso también es una gran idea descender ligeramente tus manos y acariciar sus nalgas por dentro del pantalón o por debajo de la toalla. Le pondrás a cien.

PASO 5: Deja volar tu imaginación

¿Y por qué quedarse en el trasero? Si quieres culminar tu masaje erótico y pasar directamente a la acción de una vez, este es el momento de masajear los pies y los pechos. Los pies son una de las principales zonas erógenas de nuestro cuerpo, con un gran número de terminaciones y varios puntos de estimulación sexual. Libera a tu pareja del estrés, haz que se relaje y se excite al mismo tiempo acariciando sus pies.

Y, por último, los pechos. Cuando sientas que una mujer está ligeramente excitada ya es el momento de estimular sus pechos. No tengas miedo y sírvete de tu boca y tus manos, acariciando sus senos en círculos. Ten en cuenta que puedes hacer que una mujer llegue al orgasmo con este tipo de estimulación, así que… ¡haz que disfrute!