Erotismo
Las 6 cosas que NUNCA tienes que hacer en un 69
El 69 es una de las posturas sexuales más especiales de todas. La posibilidad de dar placer oral a tu pareja mientras tú estás recibiendo el mismo placer es una sensación espectacular. Eso sí, siempre que se haga bien. La realidad es que cuando probamos esta postura no siempre resulta ser tal y como nos lo habíamos imaginado, y es que a la hora de la verdad no consiste simplemente en colocarse y ponerse manos a la obra. Mejor dicho, bocas a la obra.
Como en casi todas las posturas es frecuente algunos momentos incómodos como ciertos empujones o no recibir (o dar) el placer que habíamos imaginado. ¿La razón? Muchas veces es simplemente porque cometemos algunos pequeños errores que hacen que esta postura no salga del todo bien. Por eso, hay ciertas cosas que tanto hombres como mujeres deberían evitar si quieren disfrutar plenamente del popular 69.
1. Frotar su ano con tu nariz como si estuvieses buscando oro
Esta postura no se trata de una exploración de anatomía y aunque puede que no estés acostumbrado a hacer sexo oral del revés, de entrada deberías alejar tu nariz de su ano todo lo posible. Con ello no te estamos diciendo que te vengas abajo si lo haces por accidente pero antes de convertirte en un explorador anal es mejor que se lo preguntes antes. Principalmente porque no sabes si le gustará o no y el ano puede ser una zona muy sensible para algunas personas, especialmente los hombres.
2. Centrarte solo en tu propio placer
Sabemos que cuando estás disfrutando del sexo oral resulta algo complicado mantener la concentración en lo que tienes que hacer pero este es el reto del 69. Se trata de una postura sexual totalmente generosa, pero es muy importante la reciprocidad. Uno de los errores que algunos cometen es centrarse en disfrutar de lo que les están haciendo en lugar de concentrarse en las partes de su pareja. Como hemos dicho, es muy probable que ocurra pero intentar centrarse al 100% en tu pareja con el pensamiento de que la otra persona hará lo mismo contigo es el secreto del placer de esta postura.
3. Tener prisa cuando la otra persona va más despacio
Todo tipo de sexo es una carrera de fondo, importa el proceso no llegar lo más rápido a la meta. Por eso, no tengas prisa. Una de las cosas que nunca debes hacer en un 69 es ir más acelerado que tu pareja. Para que salga bien es fundamental estar todo lo sincronizados que podáis. Es mucho mejor ir al compás para evitar cosas raras o que tu pareja llegue antes que tú y viceversa.
4. Dejar que te haga cosas que no te gustan
Por mucho que estés ocupado o centrado en darle placer a la otra persona esto no significa que tengas que dejarle hacer algo que no te gusta. No tengas inconveniente en parar un momento para avisarle que justo eso que está haciendo te está cortando el rollo. La comunicación en la cama siempre ha de fluir entre vosotros para lograr un mayor placer.
5. No cambiar de postura aunque estés muy incómodo
Si estás más pendiente de lo incómodo o de si te está dando un calambre será totalmente imposible que disfrutes del 69. No tengas problema en modificar un poco la postura. Podéis intentar colocaros de lado, una posición bastante más cómoda e igual de placentera.
6. No llegar al orgasmo porque estás en una posición imposible
Muchos hombres y mujeres se obsesionan con llegar al orgasmo (o que lo haga su pareja) pensando que es la única manera de disfrutar plenamente del sexo. Cuando practiques el 69 olvídate de esa obsesión por llegar a tu propio orgasmo. Con ello no queremos decir que no te lo propongas como un desafío pero te aseguramos que ambos disfrutaréis mucho más si simplemente pensáis en pasarlo bien en ese momento. Si te dejas llevar y te centras en darle placer a tu pareja, es una pista de que lo estás haciendo bien.
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