Hombres
¿Tentado a la infidelidad? Motivos por los que ser fiel es tan difícil
La infidelidad es más común en la mayoría de las relaciones de lo que muchos pueden llegar a pensar. De hecho, según el promedio de estadísticas, un 60% de los hombres son infieles respecto a un 40% de mujeres. Sin embargo, los números están empezando a igualarse y es que la infidelidad ya no es algo solo de hombres. Pero, ¿por qué nos resulta tan difícil ser fieles?
En ocasiones creemos que somos felices con nuestra pareja hasta que aparece otra persona que nos despierta el deseo que no sabíamos que teníamos dormido y nos resulta casi imposible resistirnos a una aventura. Hay muchas razones por las que nos vemos tentados a una infidelidad, incluso cuando nuestra relación no está atravesando ningún bache. A veces es simplemente que no estamos hechos para ser monógamos.
1. Las mujeres pierden el interés con el tiempo
Muchos científicos aseguran que la monogamia resulta más difícil para ellas que para ellos ya que son precisamente las mujeres las que más pierden el interés y el deseo sexual con el tiempo. Una mujer se siente atraída por la pasión y la adrenalina propia del principio de las relaciones pero cuando se ha tenido relaciones sexuales con la misma pareja durante muchos años se necesita innovar para mantener viva la llama, por lo que no podrán resistirse a ese alguien nuevo que despierte su deseo.
2. Aburrimiento y monotonía
Uno de los motivos principales por los que nos cuesta tanto ser fieles es por la monotonía de las relaciones. La rutina y el día a día nos genera un tremendo aburrimiento. Es precisamente esta sensación la que nos provoca infidelidad y nos hace preguntarnos si de verdad seguimos enamorados o no de nuestra pareja.
3. Los hombres pierden el deseo sexual con la monogamia
Mientras que las mujeres pierden la libido a lo largo del tiempo, los hombres experimentan un descenso de su deseo sexual con la monogamia. De acuerdo con algunos expertos, el decrecimiento de la libido en los hombres es el resultado de tener solo una misma pareja sexual por un largo tiempo. En resumen, saber con seguridad que tenemos ahí a la misma persona todos los días no nos hace desearla tanto.
4. Atracción por otras personas
En estos casos no importa si estamos atravesando o no una crisis con nuestra pareja. Es cierto que cuando nuestra relación está en un mal momento tendemos a fijarnos más en otras personas pero incluso cuando no lo hace no podemos evitar sentirnos atraídos por otros y cuanto más fuerte sea esa atracción más complicado nos resultará mantenernos fieles.
5. Necesidad de atención
Otro de los motivos más comunes por los que nos cuesta tanto resistirnos a la tentación de una infidelidad es porque necesitamos sentirnos queridos y deseados, algo que muchas veces suele dejarse de lado en una relación estable y duradera. La mayoría de mujeres aseguran ser infieles porque no se sienten deseadas por su pareja o porque son ellas las que dejan de sentirse atraídas por la otra persona.
6. Curiosidad por probar algo nuevo
Este motivo podría ser una consecuencia más del aburrimiento y la monotonía de las relaciones a largo plazo. En ocasiones solo queremos explorar nuevos horizontes y descubrir nuevas sensaciones y un amante es una buena manera de hacerlo. De cualquier modo, tener una aventura puede ser algo muy excitante y muchos sienten curiosidad por la sensación de intimar con un desconocido.
7. Insatisfacción sexual
Este es sin duda uno de los motivos principales por los que nos cuesta tanto ser fieles, especialmente cuando hablamos de una infidelidad sexual. La falta de satisfacción sexual es más común de lo creemos en muchas parejas. Cuando alguno de los dos no se esfuerza suficiente por satisfacer al otro puede ser que uno de los dos se vea empujado a buscar fuera lo que no obtiene en casa. Como siempre, la solución en estos casos está en mejorar la comunicación de pareja.